La dermabrasión fraccionada que resulta en la inducción de colágeno con el uso del Dermapen reduce la apariencia de arrugas, piel dañada, cicatrices de acné o quirúrgicas, así como estrías.  Este tratamiento revitaliza la piel mejora su textura haciéndola más uniforme, más tersa.

El tratamiento consiste en una dermabrasión con el uso de Dermapen, que con su tecnología fraccionada combate estos y otros signos de envejecimiento.  Los resultados de la dermabrasión fraccionada con el Dermapen pueden durar hasta 2 años, con un adecuado régimen de cuidado de la piel.  Su tecnología hace que sea más cómoda que otros métodos de inducción de colágeno.   Con el uso de agujas ultra finas se activa el proceso de regeneración tisular lo que lleva al cuerpo a producir nuevo colágeno y elastina, proteínas que promueven una apariencia más fresca, tersa y joven de la piel.

Un excelente complemento para el tratamiento con el Dermapen es la aplicación de PRP o plasma rico en plaquetas.  Ambos tratamientos son totalmente naturales, lo que reduce las posibilidades de efectos adversos.

Se puede ajustar la profundidad del tratamiento para ser usado en distintas condiciones de la piel.  El método de daño controlado de la piel impulsa al cuerpo a volver a una etapa de regeneración.  La ruptura de las fibras densas de colágeno de las cicatrices llevan a su reposicionamiento y mejora la apariencia.

El tratamiento puede hacerse más o menos agresivo, según los deseos del paciente y la indicación del médico.  Usualmente toma unos 30 a 60 minutos realizar el tratamiento y a los 3 días ya no se evidencia el mismo.  Los beneficios de la dermabrasión fraccionada con Dermapen son visibles luego de 6 a 8 semanas al ser producido el colágeno.  El paciente verá mejores resultados, para la mayoría de las condiciones a tratar, al recibir el tratamiento con Dermapen 3 a 4 veces, en un año.

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